El 24 de junio pasado, cerca de las 9, el tesorero de una empresa salió de la sede ubicada sobre la Ruta Nacional 51 con más de veinte millones de pesos en un bolso.
Al llegar al kilómetro 6.5 de la ruta, se encontró con un control de tránsito aparentemente realizado por Gendarmería Nacional. Los supuestos gendarmes, vestidos con uniformes verdes, habían colocado conos en la carretera y detuvieron el camión de otro empleado de la misma empresa que circulaba delante del denunciante.
Tras la revisión del camión, los falsos gendarmes le indicaron al tesorero que detuviera la marcha de su auto. Uno de los individuos le solicitó la documentación al conductor y le preguntó sobre su destino y el motivo de su viaje. Luego de revisar el baúl y el interior del vehículo, le ordenaron estacionar a un costado de la ruta.
Cuando el empleado se bajó del auto, el falso gendarme le dijo que debía acompañarlo a la Gendarmería. Al intentar conducir su propio vehículo, le indicaron que debía sentarse en la parte trasera. En ese momento, un tercer individuo con la capucha puesta se subió al asiento del conductor e inició la marcha.
Sospechando que se trataba de un robo, el empleado increpó a los delincuentes, quienes se tornaron agresivos. Uno de ellos sacó una pistola negra y apuntó a la cabeza del denunciante, obligándolo a colaborar. Durante el trayecto, los delincuentes recibieron una llamada telefónica y se dirigieron hacia San Lorenzo por un camino de tierra.
Al detenerse, obligaron a la víctima a recostarse boca abajo en el asiento trasero y le sujetaron las manos y las piernas con precintos plásticos. Luego, los tres individuos abandonaron el vehículo, llevándose el bolso con el dinero y un teléfono celular.
La víctima logró liberarse y pedir ayuda a un grupo de empleados viales que trabajaban en la zona, quienes le prestaron un teléfono para llamar al 911. El denunciante fue examinado por el médico legal de la policía para constatar las lesiones sufridas durante el asalto.
Durante la audiencia flexible y multipropósito, la jueza de Garantías 8, Claudia Puertas, dictó la prisión preventiva para los cuatro imputados, de 25, 30, 40 y 47 años, por el delito de robo doblemente calificado por ser cometido con el uso de arma de fuego y en poblado y en banda, en carácter de coautores.
