El 10 de febrero del año pasado, un hombre de 29 años que trabajaba como cabo de la policía en Tartagal, llegó al domicilio que compartía con su pareja y la encontró durmiendo junto a su hijo de 4 años.
El acusado le exigió mantener relaciones sexuales, a lo que ella se negó, y ante esto la agarró de los brazos, la golpeó y abusó de ella.
El juez Reinaldo Burgos, vocal de la Sala I del Tribunal de Juicio de Tartagal, lo condenó a la pena de seis años de prisión de ejecución efectiva por ser autor del delito de abuso sexual con acceso carnal en grado de autor.