Ideal para los fanáticos del turismo aventura, este mar de piedra blanca se extiende por la zona de la Puna catamarqueña.
El Campo de Piedra Pómez es uno de esos lugares de nuestro país que parecen salidos de otro planeta. Está ubicado en el departamento de Antofagasta de la Sierra, en la provincia de Catamarca, y es un destino imperdible para los amantes de la naturaleza y de la aventura.
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Su paisaje, producto de antiguas erupciones volcánicas en la zona, se parece a un mar de piedra modelado por el viento. En sus 25 kilómetros de extensión hay esculturas naturales de formas inimaginables en tonos que van del blanco al crema y al gris, con crestas de color rosa.
El Campo de Piedra Pómez está ubicado en la inmensidad de la Puna catamarqueña, a unos 35 kilómetros de El Peñón (la localidad más cercana) y a 63 de la Villa de Antofagasta.
En cualquiera de esos lugares se puede dormir y contratar excursiones para visitarlo. Hay que tener en cuenta que se accede sólo con vehículos 4×4, y preferentemente con un guía de la zona. Una vez en el lugar, es posible caminar entre las formaciones y llegar a puntos con vistas increíbles.
Los recorridos suelen hacerse por la mañana, cuando el viento no sopla tan fuerte. Algunos circuitos para descubrir son los llamados “Gigantes de Piedra Pómez”, “La Lagunita Escondida” y “Balcones de Laguna Purulla”.
Como es un área natural protegida, las actividades permitidas son de bajo impacto e incluyen caminatas, avistajes y fotografía. En este sentido, la recomendación es circular sólo por caminos habilitados o que estén indicados ya sea por cartelería o por un guardaparque.
Además, es importante avisar al guardaparque los recorridos que se van a realizar y no llevarse del lugar piedras, piezas arqueológicas ni ejemplares de flora o fauna.
