Romina Irene Moreyra (25) fue condenada en un juicio abreviado a la pena de cinco meses de prisión condicional por los delitos de robo simple (dos hechos) y hurto simple, en concurso real.
En el mismo fallo, por los mismos delitos, fue condenado Fernando Nicolás Vargas Agüero (30) a la pena de cinco meses de prisión efectiva. En su caso, el juez Pablo Farah, vocal de la Sala III del Tribunal de Juicio, revocó la condicionalidad de una condena dictada anteriormente al imputado y unificó ambas penas en el monto de tres años y cinco meses de prisión.
Vargas Agüero cumplirá la condena en la cárcel penitenciaria local.
Moreyra, en tanto, deberá cumplir una serie de reglas de conducta durante dos años para conservar la modalidad de prisión en suspenso. Entre ellas, abstenerse de usar estupefacientes y de abusar de bebidas alcohólicas; evitar cualquier tipo de contacto con los denunciantes y prohibición de ejercer actos de violencia en su contra; someterse a tratamiento médico o psicológico, previo informe que acredite su necesidad y eficacia.
La pareja fue condenada por tres hechos ocurridos entre agosto y noviembre del año pasado. Dos de las denuncias fueron presentadas en la Comisaría 12 de barrio Santa Ana; la tercera, en la Comisaría Séptima.
Uno de los denunciantes refirió que el 14 de agosto de 2020, alrededor de las 3 de la mañana, se encontraba en la parada de colectivos del transversal junto a unos amigos cuando se acercaron Moreyra y Vargas Agüero. Ambos estaban alterados, aparentemente bajo los efectos de sustancias estupefacientes. Les pidieron dinero y ellos se negaron a darles. Entonces la imputada le pidió al denunciante que le prestara el celular para llamar a un remís. Él accedió y no se lo devolvieron. Les exigió que se lo dieran y Vargas lo golpeó. Luego, los dos acusados se fugaron en un remís.
La otra denuncia fue presentada el 30 de agosto de 2020 por una joven a quien Moreyra le sustrajo el celular y dinero en efectivo, tras golearla en al cara. Posteriormente, la imputada huyó con Vargas Agüero, quien la aguardaba en una motocicleta.
Finalmente, el 1 de noviembre de 2020, Moreyra le arrebató el celular a un hombre que se encontraba enviando un mensaje en la vía pública. La mujer le pidió que le prestara el teléfono para mandar un mensaje y salió corriendo. Quiso perseguirla, pero Vargas Agüero se interpuso junto a otro sujeto y le advirtió: “Ya fue, tomate el palo o te vamos a hacer cagar”.
