Fruto de los millones de dólares que ha generado a base de su fútbol, Lionel Messi posee varias inversiones en varios rubros, que no necesariamente están ligados al mundo de la pelota, y entre ellas se destacan dos hoteles de primer nivel: uno en Mallorca y otro en Ibiza.
Estas dos instalaciones pertenecen a la cadena hotelera MIM Hotels (Majestic i Messi Hotels), gestionada desde 2017 por Majestic Hotel Group, que busca brindar un servicio de excelencia a sus huéspedes, quienes ahora podrán disfrutar también de una experiencia única cuando quieran refrescarse en las piscinas de las instalaciones.
Es que la pandemia del COVID-19 paralizó las operaciones de los hoteles en todo el mundo, pero Messi aprovechó este tiempo para poner a punto ambos edificios y darles un toque de distinción, como suele otorgar él dentro del campo de juego. La renovación más destacada de sus hoteles es que sus piletas tendrán un efecto constelación, es decir, que gracias a unas luces especiales, quien observe el agua de noche sentirá que en realidad está mirando un cielo estrellado.
Pero no solo eso, sino que quienes se zambullan en las aguas de la piscina del MIM Ibiza podrán disfrutar de la música de un DJ bajo el agua, gracias a la instalación de una nueva tecnología que permite oír sonidos de manera submarina. “Dentro del agua, el sonido viaja mucho más rápido que en el aire, así que no solo lo escuchas con tus oídos, sino también a través de tus huesos”, explicó en 2016 Joel Cahen, fundador de Wet Sounds, una de las compañías detrás de este nuevo avance, y que ya en ese entonces prometía extender esta experiencia en un futuro a cadenas de hoteles.
El hotel de Ibizia ya reabrió sus puertas la semana pasada, mientras que el de Mallorca lo podrá hacer a partir del jueves. A su vez, el US Green Building Council ha premiado a ambos edificios con el sello LEED, que lo reconoce como sostenible, en el marco de la búsqueda de reducir la contaminación para luchar contra el calentamiento global. Es así que el MIM Ibiza ingresó en la categoría Gold, mientras que el de Mallorca quedó en la Silver.
Este último sufrió una renovación de la fachada y además cuenta ahora con un lujoso spa con vista al océano, para una mayor relajación de sus residentes, quienes no solo podrán disfrutar de una sesión de masajes, sino además de una vista única.
Messi compró el hotel de Ibiza en 2018. El complejo que era llamado Es Vivé se halla a metros de la playa y del mar Mediterráneo. Cuenta con 52 habitaciones que rondan entre los 225 (227) y 526 euros (647 dólares) por noche. La más cara es la suite presidencial. Además, cuenta con una moderna decoración, spa y gimnasio, entre otras comodidades. En 2020 adquirió el Fona Mallorca, ubicado en la localidad de S’Illot y a 50 metros de la playa de Sa Coma. Cuenta con 98 habitaciones, spa, gimnasio, dos piscinas y un bar-restaurante de comida mediterránea con vistas al mar.
El año pasado, la cadena hotelera propiedad de la Pulga fue también noticia luego de que decidiera ampliar su abanico de posibilidades al adquirir uno de los más exclusivos hoteles de España: el Himalaia Baqueira, ubicado en plena estación de esquí de Baqueira Beret, en Lleida. Este alojamiento se encuentra al pie de la pista de esquí, junto a una telecabina, en pleno corazón del Valle de Ruda, en el Pirineo Leridano.
En total, la cadena de hoteles de Messi está conformado por cuatro hoteles, sumado a uno ubicado en Sitges, Barcelona, que le costó cerca de USD 30 millones en 2017.