El intendente de La Caldera, Diego Sumbay, expresó su preocupación por la falta de móviles y efectivos en la Sub comisaría local, una situación que contrasta con el apoyo que reciben otras localidades del departamento.
Así lo hizo al referirse al hecho en el que una mujer fue retenida y mantenida en cautiverio durante varias horas.
“No voy a bajar los brazos hasta que se garantice la seguridad de cada caldereño y caldereña”, aseguró. Además, destacó que desde el primer momento activó el protocolo de asistencia a través del Área de la Mujer, y que se puso a disposición de la familia de la víctima para brindar apoyo.
La Caldera no sale aún de su pesar por la desaparición de Jessica Gutiérrez el 11 de setiembre del año pasado, de quien no se tienen novedades al respecto.
A todo esto, el gobierno informó que a partir de hoy reforzará el patrullaje con un móvil y 6 efectivos para crear un “corredor seguro” en las áreas más riesgosas.
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