Ocurrió esta tarde, a plena luz del día y a la vista de un grupo de gente que tomaba algo en la vereda de un bar a pocos metros del Malba. El inspector Juan Roldán falleció en el Sanatorio Mater Dei
Un inspector de la Policía Federal Argentina (PFA) fue asesinado de cuatro puñaladas en el barrio porteño de Palermo por un hombre que aparentemente vivía en situación de calle. En medio del ataque la víctima respondió con un disparo a las piernas del atacante, que resultó herido.
El hecho ocurrió esta tarde sobre la Avenida Figueroa Alcorta al 3300, a pocos metros del Malba y de la clínica Mater Dei. Todo sucedió a plena luz del día y a la vista de un grupo de gente que tomaba algo en la vereda de un bar.
“No era un hecho delictivo hasta que terminó con la muerte del policía. Una persona estaba haciendo un monólogo ante dos personas que estaban sentados en una mesa y saca un cuchillo grande y agrede a los policías”, explicó el vicejefe de Gobieno porteño, Diego Santilli.
El hombre, identificado como Rodrigo Facundo Roza, de 51 años, apuñaló a Juan Pablo Roldán, de 33 años, con un arma blanca a la altura del corazón. Tras el ataque, el agente de la Policía Federal efectuó un disparo en defensa propia. El agresor fue detenido y ambos fueron trasladados a distintos centros de salud de la zona.
Según sostuvieron las fuentes consultadas por Infobae, el policía falleció en las últimas horas en el Sanatorio Mater Dei. Roldán era un inspector que ejercía sus funciones como guardia en el predio del cuerpo de Policía Montada de la PFA. Había sido trasladado en “grave estado” por sus compañeros al centro de salud, donde falleció poco después.
De acuerdo al relato de los testigos del hecho, el policía no quiso disparar en un primer momento para repeler el ataque. Después, le disparó a las piernas para tratar de evitar causarle un daño mayor. “Al principio no le quiso disparar. Y eso le costó la vida”, señaló un testigo a este medio. Y agregó: “El atacante estaba fuera de sí”.
Nacho Viale también resultó testigo del hecho, ya que se encontraba tomando algo en el lugar. “La policías nunca atinó a dispararle al pecho o a la cabeza. Tiró a las piernas. Cuando sacó el cuchillo se vio un chorro de sangre tremendo. Después lo inmovilizaron, pero nunca la policía tiró tiros para cualquier lado”, relató.
Otro de los testigos explicó que Roza ya había intentado atacar a otros policías a un par de cuadras, más precisamente en las dependencias de la Policía Montada. Poco después, apuñaló y mató a Roldán.
“Había una persona amenazando a vecinos y un policía federal actuó”, informó más tarde el vicejefe de Gobierno porteño Diego Santilli .“El policía estaba por tomar servicio”, agregó.
Según describieron fuentes de la Policía Federal a Infobae, el agresor, herido en su pierna derecha y derivado al hospital Fernández, fue detenido en la esquina del complejo de la Policía Montada de la PFA, en Cavia y Chonino.
Alberto Crescenti, titular del Same, dijo que el policía sufrió “cuatro puñaladas”. Y explicó que investigan si el agresor “tiene sus facultades alteradas”.
Casi simultáneamente, la policía logró detener en la puerta de la clínica Mater Dei, a menos de una cuadra del lugar donde apuñalaron al efectivo, a un ladrón que intentaba escapar tras un asalto en el restaurante Dandy. Allí, en la esquina de Libertador y Bulnes, había robado una billetera y un celular. La persecución terminó con su detención en Castex y San Martín de Tours.