En dos semanas, el magazine de El Trece ya tuvo diez conductoras: una de ellas no regresaría y el programa continuaría al aire con un “mix” de anfitrionas
Lo primero que se preguntaron Marcelo Tinelli y su equipo de productores fue por qué las autoridades de El Trece levantaban Corte y Confección, un programa suyo que funcionaba bien de rating en la primera tarde de la emisora, lo que lo obligaba a buscar una alternativa para producir en la misma franja horaria y conservarla.
El disputado horario posterior al noticiero del mediodía del canal entró en un errático sendero tras la salida del aire, después de siete temporadas exitosas, de El Diario de Mariana, con Mariana Fabbiani: otro programa cuyos hacedores tampoco entienden por qué salió del aire.
Las sucesivas movidas de programación en la grilla vespertina de la emisora que comanda Adrián Suar no han dejado de dar tumbos desde fines del año pasado. Esto provocó enojos, crisis internas, reproches, favoritismos, enroques de programas y la eterna pelea con la dirección de noticias que ha exigido a Suar encontrar el programa que le deje a Telenoche -el noticiero central del canal- un número de rating que lo conforme.
En el camino cayeron algunas víctimas, como Iván de Pineda -su exitoso Pasapalabra también salió del aire pese a la queja de sus fanáticos- o la propia Fabbiani, hasta llegar al movido debut del ciclo Mujeres de El Trece. Nada parece acomodarse del todo en las tardes del canal. La última noticia cuenta que Soledad Silveyra, una de las conductoras del magazine recientemente estrenado, no volvería a la pantalla.
La ruta del escándalo empezó con la conformación de un plantel femenino para un magazine en el horario de las 14:30 producido por la factoría Tinelli en lugar del reality de moda que conducía Andrea Politti. Muy rápidamente LaFlia tuvo que desempolvar una idea que ya había presentado cuando terminó El diario de Mariana, al igual que todas las productoras que arman contenidos para el canal. En ese momento resultó ganadora Mandarina, de Mariano Chihade, que logró conservar el espacio con el luego fallido Crónicas de la tarde que condujo Mónica Gutiérrez durante no mucho tiempo.
Cuando ese programa no funcionó se corrió el ciclo Corte y confección, que marchaba dentro de los números esperados. Pero algo no le gustaba a las autoridades del canal y ordenaron su levantamiento, obligando a Tinelli a buscar otro proyecto que derivó en el desembarco de cinco mujeres al frente de un solo programa. Si la conducción en binomio muchas veces no resulta, el desafío se multiplicaba por cinco al unir a Solita Silveyra, Claudia Fontán y Teté Coustarot junto a las “nuevas” Roxana Vázquez y Jimena Grandinetti.
A solo una semana del debut cuatro de ellas terminaron aisladas por el contagio de COVID-19 de Fontán -contrajo el virus en la radio La 100, haciendo el programa con Guido Kaczka, también positivo-, y todas marcharon a su casa con excepción de Vázquez, quien como ya estaba contagiada al momento del debut del programa no había compartido el estudio con sus compañeras. Pero en la salida y posterior reemplazo de las conductoras titulares con Florencia de la V, Luli Fernández y María Julia Oliván, se habría decidido el no retorno de Silveyra.
Por lo pronto ella no regresaría mañana, y según fuentes consultadas, el retorno no se produciría después. Ahora quedará un “mix” entre el primer y segundo equipo de conductoras, con el regreso de Teté y Grandinetti, sumadas a Vázquez, De la V y Oliván; a la espera de la vuelta de Fontán. Una verdadera ensalada de conductoras: en dos semanas diez mujeres estuvieron al frente del ciclo. Lo más insólito resultó que cinco de ellas hicieron la producción de fotos inicial y las notas de prensa; para no llegar a estar nunca todas juntas en pantalla en medio de la crisis que genera la pandemia del coronavirus. Una mala relación entre Soledad Silveyra y Teté Coustarot fue -según algunas fuentes- el detonante que estuvo cerca de llevar a una prematura renuncia de la actriz antes del aislamiento por el COVID positivo de Fontán, que luego fue desmentida. Ambas salieron al aire desde sus respectivas casas, mientras continúan cumpliendo con el aislamiento preventivo, y se refirieron a las diferencias que pudieron surgir en sus reuniones vía Zoom durante el armado del programa.