El piloto neerlandés logró la 30° victoria de su palmarés. Dominó a voluntad en Monza.
A esta altura del mundial de la Fórmula 1, la cosa parece estar ya definida. El dominio abrumador del neerlandés Max Verstappen sobre todos y cada uno de sus rivales se afianza y agiganta cada día más. Es, sin lugar a dudas, el piloto del momento y uno de esos que seguro dejan huella.
Como dirían en la tribuna, “no hay con qué darle”. Y los números mandan.