Trabajadores se encontraban realizando trabajos de pintura en el tercer piso de un edificio de la peatonal Caseros
A un tacho plástico con 20 litros de pintura lo subieron con una roldana, pero al llegar a su destino uno de los empleados al querer desengancharlo se le escapó de las manos y cayó al vacío en plena peatonal.
Por suerte nadie pasaba por el lugar, porque el resultado podría haber sido trágico.
El único inconveniente fue que varios transeúntes resultaron salpicados cuando el tacho se estrelló contra el piso.